viernes, 31 de enero de 2020

Las verdades del barquero


La barca de Treto ©  Grabado de Mariano Pedrero del año 1880

La barca de Treto
La barca de Treto fue una popular gabarra. Una pesada barcaza cántabra, convertida en transbordador, impulsada por un cable desde una orilla a otra de la Ría de Treto, Santander, por donde pasaban diariamente una media de cuatrocientos viajeros, doce coches diligencia de la época, treinta carros y unas cien caballerías.
Una vergüenza, para la prensa santanderina de la época, para un punto tan transitado, como lo recoge El Correo de Cantabria, el día 8 de julio del año 1889.
Barca que unía el pueblo cántabro de Treto con el de Laredo. Barca que unió, fortaleció o deshizo, según se mire, numerosas amistades y familias enteras. Así nació un pequeño romance, que pronto se hizo canción:

La barca marinero, la tengo que pasar.
La chicas de Laredo, no las puedo olvidar.
Y no las puedo olvidar, porque las tengo amor.
Mas quisiera morir, a decirlas que no.

Las verdades del barquero
Con los años, la popular barcaza santanderina se transformó, primero en un barco a motor de los de siempre y luego en un moderno catamarán que hacía el recorrido en un suspiro.
Años mas tarde, en mi infancia y adolescencia, frecuenté el lugar y dada las pequeñas dimensiones de aquel barco, compartí amena conversación y las certeros análisis del barquero.
"Observa, muchacho", me decía, casi en en verso, emulando a Espronceda: "Allá mueran feroz reyes por un palmo mas de tierra, cuando yo aquí tengo por mío lo que abarca el mar bravío, a quien nadie impuso leyes.
Mira al frente, que tenemos todo el mar Cantábrico para  nosotros solos. Y allí está Asia, a un lado; al otro Europa; y allá al frente, Estambul".
Pero la mayoría de los días me hablaba del tiempo. Otras veces de los increíbles vuelos de los mirlos, procedentes de las marismas de Santoña, que nos sobrevolaban a menudo, durante el trayecto.
Otras veces me hablaba de las sardinas de Laredo, de las anchoas de Santoña, del bocarte, del atún, del mero. Siempre, con la enorme autoridad le daba su conocimiento del lugar y de los numerosos viajes que efectuaba cada día, de un lado a otro, desde este lado, al otro de la ría de Treto y de la vida también.
En el lado, del pueblo de Colindres, a estribor, un muro de contención acogía el puerto, dotado de un pequeño astillero para el acopio de materiales, y para efectuar mejoras de buques maltrechos.

Colindres y Santoña
Colindres, era el tercer puerto pesquero mas importante de Cantabria en capturas. Sobre todo de las deliciosas anchoas, reconocidas en todo el mundo. Y de los bocartes, para abastecer a las varias fabricas de industria conservera de la zona. Enseguida llegaba la época del mero, en invierno, la del bonito, en verano. O el tiempo de la merluza, el besugo, o el exquisito rape, para los mas exigentes.
Con el mar abierto, al frente, el barquero navegaba visualizándolo todo y sorprendiéndose por todo.
Incluso, un buen día encapotado y triste, de esos que no se olvidan, me habló de que un conocido marino, natural de Santoña, un político muy conocido, una persona muy importante e influyente, amigo personal del General Franco, de pobladas cejas, que llegó a ser Presidente del Gobierno, que lo asesinó la banda ETA, se había dirigido a sus vecinos para solicitar que fueran denunciadas las actitudes sospechosas de las personas de Santoña y de los pueblos cercanos. Tales, como la huida o el traslado precipitado de grupos enteros de familias a horas impropias. O la actividad de los obreros o de los marineros, que siendo propietarios de pequeños talleres o comercios, los mantengan cerrados o no desarrollen actividad alguna en ellos. Y eso, me dijo, no estaba bien.
Eran las verdades del barquero. Verdades como puños. Incuestionables, rotundas, sinceras.


Ovación al presidente  Pedro Sanchez de los diputados del Partido Socialista y de Unidas Podemos.
Imagen ©  Uly Martín

El Hemicisco
El pasado martes día 7 de enero de 2020, vivimos una jornada semejante en el Hemicisco. El de las medias verdades de algunos y de las rotundas verdades del barquero de los otros.
La misma vergüenza ajena para un Hemicisco tan transitado..
Fue el día en que el candidato socialista, Pedro Sánchez Castejón, consiguió ser presidente del primer Gobierno de España de coalición, en toda la historia democrática de España tras la República .
Investidura que salió adelante por tan solo dos votos de diferencia y pone punto final al bloqueo. Aunque en democracia un voto es mas que suficiente.

Gobierno de coalición
Las derechas del Hemicisco no había aceptado el resultado de las urnas, que otorgaron la confianza y el mayor número de escaños al partido socialista, con 120 escaños, muy por encima de su inmediato seguidor, el Partido Popular, con menos de la mitad de diputados y hasta en cinco ocasiones, en un Parlamento con mas de 19 partidos, muy fragmentado.
Eso fue lo que votaron los españoles, hasta en cinco ocasiones en poco menos de cuatro años: Un Gobierno de Coalición, en un parlamento muy fragmentado, necesitado de pactos puntuales para sacar adelante los presupuestos del Estado y la propia legislatura.Y ese fue el candidato propuesto a la Cámara de Diputados por Su Majestad El Rey, don Felipe, para gobernar España.
A esto hay que añadir que existe una constitución material de España que está en la intra historia, que diría Miguel de Unamuno, que tiene tres capitales: Madrid, Barcelona y Bilbao. Y es necesario mantener una armonía entre las tres capitales en donde se sustentan los cimientos del Estado español. Era necesario pactar. Llegar a un acuerdo de Investidura. Aunque, con un Hemicisco tan fragmentado, no era, ni es, nada fácil.


La portavoz, Cayetana Álvarez y el presidente del Partido Popular, Pablo Casado. Imagen ©  Uly Martín

La gran bronca
A los tres partidos de la derecha no les pareció bien y creyeron que se les quitaba lo que era suyo: España, y montaron la gran bronca.
Ellos tiene el firme convencimiento de que España es suya, los únicos legitimados para gestionarla. Y cuando los resultados electorales la apean del poder, se comportan como si se la hubiesen robado. La calle es y será siempre suya, que lo advertía, rotundo, el fundador del Partido Popular, Manuel Fraga.
Cuando la izquierda accede al poder la derecha se lo toma muy a pecho y despliega una sombra de duda e ilegitimidad sobre ella de inmediato.

Los jabalíes
De inmediato surgieron los jabalíes, un término muy empleado en el período de la República, para denominar a los parlamentarios mas ariscos, broncos y activos de cada grupo parlamentario, perfectamente organizados e identificados, que aparecen en los plenos mas sonados.
Fue un verdadero caos de Hemicisco, que bien retrata el sentir de un país.
Pero, entre tanta bronca, que continuación desvelaremos, alguien se encargó de recordar las verdaderas verdades del barquero de mi infancia y adolescencia.

El fraude electoral. La falta de legitimidad
Abrió fuego el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, que desde la moción de censura sufrida por su partido por corrupción, que les apeó del Gobierno, viene insistiendo en el fraude electoral y en la falta de legitimidad del presidente del Gobierno y de su Gabinete, siempre que tiene ocasión, en la misma linea dura de acoso y derribo mantuvo su antecesor y compañero de partido, el ex presidente José María Aznar:
"¡Usted forzó una repetición electoral con el compromiso de no depender de la ultra izquierda, los separatistas y los batasunos!," exclamó. "Y hoy nos los trae aquí sin dar una sola explicación por su engaño masivo a los votantes españoles".

Las verdades del barquero
En su turno de intervención, el portavoz del partido valenciano  Compromís, Joan Baldoví, tomó la palabra para recordar a la bancada de la derecha "que no saben perder y que convendría se tomaran rápidamente una tila".
En una siguiente intervención matizó "que el era maestro, que el Hemicisco olía a napal,  y que no era suficiente con una tila, puesto lo que les hacía falta era algo de mayor calado: La buena educación".
Por ese mismo tiempo, el portavoz del Partido Nacionalista Vasco PNV, Aitor esteban, dio todo un curso de parlamentarismo a sus señorías, al recordarles a lo que habían venido: A votar al candidato propuesto. Sobre todo, a los sentados en la bancada de la derecha, citando a "dos buenos amigos suyos vascos, que un buen día se fueron al monte a coger setas. Y después de un buen rato, cansados, de no encontrar ninguna, va uno y tropieza con algo duro en el suelo. Y al agacharse y recogerlo, ve que es un reloj de pulsera Rolex. Y va  y le dice al otro: ¡Ahí va Patxi, un Rolex! Y éste le contesta mosqueado: ¿Oye. Pero a qué hemos venido. A por los Rolex o a por las setas?"
Aitor Esteban del PNV, también quiso subrayar "que Pedro Sánchez era candidato a la Presidencia del Gobierno porque lo propuso El Rey, al que tanto citan las derechas"
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Manuel Fraga Iribarne. Ministro de Información y de Turismo del Gobierno del  General Francisco Franco, y fundador del Partido Popular PP, en el último congreso de Alianza Popular AP, antes de ser re fundado y reconvertido en el actual Partido Popular PP. Fotografía © Roberto Cerecedo  
                      
Manuel Azaña
El otrora presidente de la República.Española, Manuel Azaña Díaz, del que se cumple el ciento cuarenta aniversario de su nacimiento el próximo lunes, 10 de febrero de 2020, volvió igualmente a estar presente en el Hemicisco, pero esta vez en boca de quien ostentan ideologías totalmente opuestas a la suya, como las de Pablo Casado, presidente del conservador Partido Popular y de Santiago Abascal, presidente del partido de ultra derecha Vox.
Ambos citaron a Manuel Azaña, cuando seis meses después del Golpe de Estado franquista, en el mes de enero del año 1937, de hace hoy ochenta y tres años,  trató de explicar en el Hemicisco "como una parte del ejercito de la Nación, como brazo ejecutor de partidos políticos adversos al Régimen, se sublevó contra el Gobierno republicano, con el propósito de derrocar por la fuerza el régimen que la nación española libremente había elegido".

La independencia de España
Pero esta cita del presidente de la República, Manuel Azaña, fuera de contexto, fue usada, sesgada y relatada de forma diferente,  por los dos líderes de la derecha, en beneficio propio.
Dijeron ambos: "Como decía Azaña, os permito, tolero, admito, que no os importe la República. Pero, al menos, ¡que os importe España!"
Cuando las palabras exactas de Manuel Azaña, en momentos de suma gravedad, por la participación de dos potencias extranjeras, Alemania e Italia, en la guerra, el siempre se refería a la guerra como una invasión extranjera,  fueron: "Os permito, tolero, admito que no os importe la República. Pero ¡que no os importe la independencia de España! ¡Que podáis creer que es lícito seguir siendo neutrales cuando España está invadida y en peligro de que pase al dominio de un país extranjero! Eso no puede ser".  Puesto que fue decisivo el apoyo, al ejército sublevado franquista, de las tropas nazis de la Alemania de Hitler y de las tropas fascistas italianas de Mussolini para el desenlace final de la guerra.
  

La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, escucha a los miembros de la Mesa, Ana Pastor, del Partido Popular y a Gil Lázaro, de Vox, tratando de poner orden. Imagen © Uly Martín  

Lo mejor estaba por venir
Como se sabe, lo bueno del futuro es que siempre está por venir. Y cuando viene, llega convertido en presente. Por eso lo mejor está siempre por venir.
El principal riesgo para la democracia española, como se encargó de aclararlo alguno, no es la abstención del partido independentista Ezquerra Republicana ERC, ni la abstención de los herederos de Batasuna, EH Bildu para permitir la Investidura.
Nada es tan peligroso para la democracia como la actitud arrogante e intransigente de una derecha presuntamente democrática, incapaz de aceptar serenamente su derrota.
Pablo Casado puso todo su empeño, en sus cinco últimos minutos de intervención, en tratar de erosionar al candidato a la presidencia del Gobierno de España ganador de las elecciones, propuesto por El Rey:  "Usted es un ultra que pretende cambiar el régimen de la Constitución de 1978 y con sus socios atentar contra la legalidad, la igualdad, la tolerancia, la propiedad privada, el libre mercado, la libertad individual y la de prensa"
Para añadir, enfáticamente, que: "La democracia española ha tenido dos grandes enemigos: Los terroristas y los golpistas. Hoy ha puesto nuestro futuro en sus manos, a costa de desmembrar el Estado y liquidar el socialismo constitucional".
Obviando que fue el malogrado socialista Alfredo Pérez Rubalcaba y las Fuerzas de Seguridad del Estado a su mando, los que acabaron con la banda ETA limpiamente y sin concesiones.


                                     La portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua. Imagen © Uly Martín 

El turno de EH Bildu
La puertas del infierno se abrieron, de par a par, sin titubeos y sin  el menor esfuerzo, con la intervención del portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua y desató los ánimos mas enervados  y  bien predispuestos para dar la primera de las batallas de los jabalíes del Partido Popular.
Su mera presencia en el atril, originó el rechazo expreso a gritos de la bancada de la derechas.
Es igual que el portavoz de EH Bildu no dijera nada del otro mundo, de lo ya sabido, acerca de sus conocidas opiniones, mil veces repetidas, sobre España, "en su deriva autoritaria", dijo y sobre El Rey, al que criticó su discurso de 2017. Y que la presidenta del Congreso, Meritxell Batet se desgañitara,  tratando de proteger su derecho de libertad de expresión, al igual que el derecho de cada uno de los portavoces de todos  los grupos parlamentarios.
Mertxe Aizpurua defendió, desde el atril, las tradicionales posiciones del independentismo vasco. No hizo apología del terrorismo. De hecho los abertzales se han integrado en las instituciones del Estado y han rechazado la violencia. Y no citó nunca a ETA.
De esto último, de citar a la banda ETA, se encargaron, sin reparos, la bancada de las derechas, para tratar de erosionar al presidente del Gobierno Pedro Sánchez, puesto que de todos era sabido que EH Bildu iba a permitir la Investidura del presidente Sánchez con su abstención, cosa que no están, ni estaban, dispuestas a hacer las derechas.  

Qué vergüenza
Tan solo eso, fue la excusa, para que el presidente del partido Popular, Pablo Casado, se diera golpes de pecho acompasados, mientras gritaba "¡Qué vergüenza!", "¡Esto es apología del terrorismo!"  "Ha sido la intervención mas nauseabunda de los herederos de ETA". Llegó a decir.
Mientras, desde su bancada, arreciaban con fuerza los gritos de  "¡Fuera, fuera!" dirigidos a la portavoz de EH Bildu, acompañados de toda clase de insultos e improperios, como "terrorista", "asesina", "tienes las manos manchadas de sangre", "condena el terrorismo", "pide perdón". Y toda la derecha se unió al Partido Popular, al grito de "¡Libertad, libertad!"
Además,  el presidente del partido ultraderechista Vox, Santiago Abascal, acompañado de dos diputados de su partido, se ausentaron del Hemicisco mientras intervenía la portavoz de EH Bildu. Y el hijo del ex presidente del Gobierno Adolfo Suarez, Adolfo Suarez Illana, miembro de la Mesa del Congreso de Diputados, y militante del Partido Popular, en un gesto de rechazo sin precedentes, se giró en su butaca y dio la espalda a la portavoz de EH Bildu durante toda su intervención.
Lo que no hace otra cosa que confirmar que,  la utilización del terrorismo, a pesar de la desaparición de la banda ETA, será clave en la política de intento de acoso y derribo del Gobierno de Pedro Sánchez.


Manuel Pablo Iglesias se emociona al abrazar a Pablo Echenique. Imagen © Uly Martín  

El vicepresidente Manuel Pablo
El vicepresidente del Gobierno de Asuntos Sociales, Manuel Pablo Iglesias Turrión, que se emocionó tras  la Investidura, asumió su papel de responder a las derechas. Y entre otras cosas, leyó un mensaje de  Rosa Lluch, la hija del ex ministro socialista Ernest Lluch, asesinado por la banda ETA, en el que decía: "No hablen ustedes en nombre de las víctimas del terrorismo, porque muchos hemos apostado por el diálogo y no por el odio. Basta ya de usar nuestro dolor en su beneficio".
Y se dirigió al presidente Sánchez, por su nombre de pila, advirtiéndole de que "a partir de ahora les atacarán no por lo que hagan, sino por lo que somos".  

Así son y así se las hemos contado, las verdades del barquero.

En una soleada y fría mañana madrileña, conmemoración del San Brexit. 
Un día triste para la Unión Europea, en la que pierde uno de sus miembros mas destacados: El Reino Unido. 
Cuenta atrás para la salida del Reino Unido,  tras cuarenta y siete años de permanencia en la Unión Europea. 
La primera escisión en su historia, que obliga a los veintisiete miembros restantes a plantearse la convivencia con la Gran Bretaña. 
¿Qué habría pensado del Brexit, Winston Churchill, convencido europeista y acérrimo defensor de la Alianza Atlántica?  ¿Qué habría pensado del defensor del Brexit, Boris Yohnson, actual primer ministro británico? 
Algunos euro parlamentarios británicos lloraron a lágrima viva. Mojaron la pestaña desconsoladamente, al  tener que abandonar sus escaños europeistas. Luego, todos juntos y unidos, entonaron la popular canción británica del inglés Jonathan Coe, "Adiós, vieja Inglaterra, adiós", antes de abandonar con pesar sus pupitres, que su letra dice algo, mas o menos así:

"Adiós, vieja Inglaterra, adiós.
Y adiós a algunos cientos de libras.
Si el mundo se hubiera acabado cuando era joven
nunca habría conocido estos pesares.
Antaño bebía lo  mejor
el mejor Brandy y el mejor ron.
Ahora me conformo con un vaso de agua fresca
que fluye de ciudad en ciudad."  

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